Querida Osa
Sé que en tu corta
edad has aprendido demasiado. La vida, tu vida ha sido marcada de tal manera
que ha logrado hacerte la persona que eres.
Yo recuerdo cuando
tenía tu edad, creo que en muchas cosas nos parecemos. También así como tú
buscaba en mi cuarto ese refugio o esa paz que mi corazón pequeño necesitaba.
También he vivido
tanto, también he llorado, he reído, he sido feliz, pero también infeliz.
Cuando uno es niño no puede comprender demasiado, sin embargo cuando uno va
creciendo ve las cosas y la vida tan distinta que el pensar en el pasado te
hace hasta sonreír, porque entonces pensamos que mucho fue absurdo. Aun así
quiero que sepas que ninguno de tus sentimientos es nada, por el contrario,
cada cosita que llevas en tu corazón vale tanto, porque en uno de esos
sentimientos estas tú y tú mi querida osa, vale muchísimo.
Nunca dejes de
sonreír, aunque te confieso que a veces pienso que has olvidado como hacerlo.
No lo permitas, no dejes que la vida se lleve tu sonrisa, tu encanto. No te
cierres en eso que crees que eres, porque veras que en realidad lo que eres es
mucho más lindo de lo que tú quieres mostrar.
REMS
(Inspirado en una
osa, la más bella)
No hay comentarios:
Publicar un comentario