miércoles, 20 de febrero de 2013

¡Me engríes! - Carta a un amigo

Que lindo, tú ahí haciéndome la comida, preparando algo como lo llamaste tú, simple... me sonrío, sí, lo hago y te lo debo a ti.

Que lindo, ojalá nunca cambies. Me pregunto por qué lo haces, siempre que nos vemos me siento querida, extrañada.

Que lindo, compras el rosé que más me gusta, porque me quieres hacer feliz, me lo sirves porque para ti soy alguien especial.

Sé que te sorprenderás al leer esto, pero sí, siento que me quieres, no como mujer, pero me quieres, y eso se agradece. No quiero perderte nunca, no quiero alejarme de ti.

Le pido a Dios te cuide y te de la sabiduría para llevar la vida con astucia, con prudencia, con habilidad, con amor.

Recuerdo el primer día que te conocí, recuerdo el primer día que me abrazaste, desde esa fecha hasta ahora, tu abrazo o mejor dicho, la forma como me abrazas ha cambiado, pero sé que lo que pensaste de mi desde aquella vez hasta ahora, es exactamente igual, quizá hasta mejor. Gracias...gracias por decirme las cosas tan directas, por darme palo como lo dices, por tu cariño, por tus palabras, por tus abrazos, por tu forma de mirarme, por tu forma de abrazarme, por tu respeto, por tu admiración.

Gracias por una velada corta pero amena. Gracias por tu tiempo, gracias por ser tú.
Te quiero mucho Isra ;)

REMS


martes, 19 de febrero de 2013

Mamita " Carta a la mamá"

A veces cuando pienso en ti y en todo lo que has vivido, me pregunto, como has podido superar tantas cosas.
Ahora siempre te escucho decir, que nosotros somos tu fuerza; pero dime algo, ¿qué era lo que te daba fuerzas antes?
Yo trato de entender lo que has vivido, trato de entender tus penas y tus frustraciones, no siempre resulta fácil entenderlas, pero lo trato.

Todo lo que has tenido que pasar, y nadie contigo, nadie quien te diga que no te preocupes, o que no estabas sola.
Ojalá yo hubiera estado ahí, como una amiga, como un apoyo. Siento pena al pensar por todo lo que has pasado, sin embargo siento también orgullo de saber que todo eso te hizo fuerte, y que esa fuerza me la pasaste.

Yo no sé cómo describirte con exactitud, sé que eres una mujer maravillosa, con fallas como todos, pero con mil cosas buenas como ninguna. Una mujer con tanto valor, con tanto ímpetu.
No te ha sido fácil, sin embargo estás ahí. Siempre una mujer de lucha y empeño. Siento orgullo por llevar tu sangre. Siento orgullo al saber que soy parte de ti. Siento orgullo al ver el gran amor que sientes por tus hijos.

Te recuerdo con tu falda ploma larga hasta más abajo de las rodilla, tus tacos de punta fina blancas, y tu blusa de seda tan linda. Siempre te veía tan bonita y femenina, me sentía enamorada de tu forma de vestir. Quería ser como tú, quería tener tu estilo, quería que me veas como tu reflejo, quería que sepas que yo tu hija haría que te sientas orgullosa de ella.

No te puedes imaginar cuantas veces lloré contigo en secreto, y cuando reías, era tan feliz, que le pedía a Dios nunca dejaras de reír.

Te amo mamita, y como siempre te lo digo, eres lo mejor que Dios me pudo haber dado en la vida.

REMS