miércoles, 12 de agosto de 2020

Llegaste!

No sé cómo llegaste o si en realidad siempre estuviste, no sé qué tan cierto sea todo eso, solo sé que se siente bonito. Había olvidado tanto cariño, sentir que te extrañan, saber que te piensan. 

Me haces reír, pensar, querer... recuerdo verte lejos, de pronto inalcanzable el uno para el otro. Sin embargo mis ojos notaban tu presencia pero hasta hoy mi mente y gran parte de mi ser, nota tu corazón. 

Hablemos un ratito, fue lo dijiste. Puedo? Preguntaste y con una dulzura increíble me besaste. Ay! Es que cómo pasó? No me di cuenta, pero el sentir nuevamente tal cercanía fue genial. 

Suave, respetuoso, tierno, me di cuenta cómo sentías mi aroma, un suspiro tuyo salía de lo profundo y yo... Yo solo sonreía ... no me viste, verdad? Mejor así...

Luego vino un abrazo, una caricia cuidadosa, recostarme en tu pecho, y tú ... acariciabas mi rostro repitiendo lo suave que soy. 

Cuánto tiempo durará? No importa, mientras sea así, disfrutémoslo. Los años han pasado y será que Dios quiso que hasta ahora nos encontremos realmente. 

Ahora desde dónde estás traes a mi alma tranquilidad, confianza, cariño. No tengo miedo ni angustia, tengo dicha y alegría. Es por ti querido mío... es por ti.

Un beso en tu frente y uno pequeño en tus labios... tus últimas palabras quedaron grabadas trayendo inspiración a la mujer que dices te gusta. 

Acá estaré si me necesitas, acá estaré sin alejarme, acá estaré en todo tiempo ... en todo tiempo, estaré.

REMS


(Fotografía: Søren Kjær- gracias por compartirla conmigo) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario